jueves, 31 de marzo de 2011

la última y nos vamos




memoria


como alcantarilla
los recuerdos cuyo volumen fuera trascendental, se verían atorados, invariablemente de los sentimientos que provoquen.
así, un gran acto de estupidez, se queda para siempre
si se aprende, no se vuelve a cometer.
un gran amor, igual se queda.
las diminutas sorpresas de cada segundo casi tanto como las agrias desazones de un enojo vano,
esas se pueden ir al caño
de esas hay toda la vida
acumularlas sería desperdiciar espacio y perder el sentido de la fascinación.

miércoles, 30 de marzo de 2011

-


—Qué estupidez!
 Otra vez muerto.
La muerte física depura la carne y queda el alma
habrá algún otro filtro para el alma y de ser así, qué quedaría?

—No lo sé beto, yo sólo soy un gato.
No prefieres una cerveza?

Sacó un fajo de billetes, saltó a la barra y pidió 2 tarros

—Toma mae, para que dejes de pensar pendejadas- dio un trago y limpió sus bigotes con el dorso de su afelpada zarpa.

—Gracias, me prestas tu 

—Date.

Liberé un tabaco de una amarradera de cabellos rubios y alcancé el encendedor que plutarco me extendía.

—Sabes, no es sencillo. tal vez para ti lo sea, pero estás muerto mae, y esto es un sueño.

—Miau

—Pero hay momentos en que no sé—
empujé el tarro despacio hacia mis labios.

—No sabes qué?

—Ese es el pedo, que no sé!
Si lo supiera, tal vez vería cómo ponerle fin, una solución o algo que iluminara mi desquicio, pero no.
Supongo que sólo no lo sé.


día de muertos

me imagino una noche tranquila, puede que sin luna

un lago de aguas negras en balsas y velas.

un porro en el cerro, carretera de estrellas.

un corazón de pulso adagio/andante.

los sonidos y caricias del cosmos que me rodea y por dentro soy.

no más palabras.


quiero morir un día de muertos.

lunes, 28 de marzo de 2011

el ovni ya viene


cuando te apodan el ovni
de entrada te confieren dos cualidades:

la primera, de objeto (inanimidad)
la segunda, de volador (como el que surca los cielos).


y una tercera, como probabilidad, ser o no identificado.

domingo, 27 de marzo de 2011

de la ilusión

Que me mires azorada y me pidas que me vaya, y yo me vaya, y tú vengas detrás de mí callada y nos encuentre dormidos la mañana siguiente.

viernes, 25 de marzo de 2011

le cerebro

esa tía ha de haber tenido fácil unos treinta y tantos años.

hablaba casual

meciendo su mano como urraca de invierno

le ofrecí un pitillo, confiando que reduciría el número de palabras por minuto.

aceptó amablemente y al primer golpe de tabaco solté:

-y has pensado operarte el cerebro antes que las tetas?



charles bukowski

jueves, 24 de marzo de 2011

µˆßt

puedes negarme tú tus besos
puedo sufrir yo en el intento
puedes reírte en cualquier momento,
de mí,
de algo incierto,
algún chiste muy mal hecho,
pero lo que no puedes cambiar
nena, no lo vas a cambiar
es que yo siguiéndote amar

Ah, maitasuna!

claro que tenía planes a 'futuro'

así como comprendía que el momento sucedía en un nanoinstante de consciencia, sentía y vivía el pasado y el futuro simultáneamente en el presente.

deconstruyendo el interés de una ligera sospecha en un ilimitado porcentaje cuantioso saciable, como por orgullo de llenar el estómago de dulces bañados en sangre cristalizada.

el cuello por la mitad y el latido en la yugular

la cobija ahogando paupérrima el espacio.

vaya manera de respirar.

martes, 22 de marzo de 2011

problemas

que sería de la vida sin ustedes?
d´nde quedar´a la imaginaci´n?

tú dices problemas
yo propongo soluciones
imaginación me sobra
más que los calzones

lunes, 21 de marzo de 2011

agujas de calcio

en un jardín zen, se vio el apocalipsis precedido por un beso.

sábado, 19 de marzo de 2011

dócil como un guante/ángulos

a
-me quiero volver chango
-por?
-no sé, crees que los changos sientan celos?
de esos como para con una mujer cuando la ves riendo con otro chango?
-celos?

-no we, no experimentan esa dualidad
-qué jodido, me quiero volver uno
-ilumínate

4
-como un revólver? cómo es eso?
-como un incendio forestal
-quema de changos?
-queman los celos
-quémalos

-tú que eres un chimpancé
y a juzgar por tu retrato
uno muy sabio
me parece impertinente preguntar, pero lo haré
ustedes los chimpancés sienten celos?

-claro we... es más, diría que ese comentario es algo insultante por tu falta de humanidad al preguntarla... es como si le preguntaras a un perro que si le duele cuando le pegas

-auch, no aush.
auch como dolor.

-jajaja


π
-pues anda de rol, lo que me lleva a hacer dos preguntas, la primera, efímera y de carácter práctico.
la segunda, de mayor importancia que ahora me replantea convertirla en primera sería
sabes por qué los celos?

-si, muy fácil. porque las personas se sienten con derechos sobre otro. sentido de pertenencia.
como si conocieras a alguien, y por el tiempo que han pasado juntos, creyeras que tienes algún derecho sobre la persona.
muy tonto y humano.


-me dan miedo, me parecen humanoides y feos
-los celos?
-los changos

[11:22]

abro los ojos
la luz atraviesa la ventana
se anticipa el retraso
quién para asegurar que esto no es un sueño
medio calculo la hora
y otra vez me encuentro abriendo los ojos
viendo el sol parido de una esquina.
golpeé a aquel tipo porque lo creí necesario
salté de un edificio y ahí estaba conversando con viejos amigos, echando chelas o caminando por la uaq con un porro en balsas navegando la esfera
el calor se hace soportable por el viento
y reconozco su voz, su vestido junto a su indiferencia atravesando el campo
mota
siempre hay mota
para olvidar a corto y largo plazo
como lentes de distintas curvas y tamaños que ofrecen distintas perspectivas
no puedo seguir/empezar porque en cuanto me acerco a ver tus ojos lo que me saluda es tu espalda riendo de algo más
cuando encuentro una idea o pensamiento que me trae felicidad, lo comparto para escuchar con desánimo un 'pues no sé' ó un 'no' o algo que quiebre mi voluntad
o despierto y me encuentro en lugares que no conozco
con gente que no conozco
escucho todo el tiempo
escucho más allá de lo que hay en mi cerebro
escucho el latido de mi corazón
el fuego que consume el tabaco
las aves en todos lados, silbando o durmiendo entre los árboles
la carretera que circunda el lugar
la electricidad de los focos
escucho todos los comentarios
unos me dan risa
otros sinceramente -y no podría asegurar por qué- hacen lágrimas brotar,
por nostalgia,
melancolía
o mera apatía confundida
ok
tal vez esto no sea un sueño
tal vez después de todo sólo sea una jodida pesadilla

jueves, 17 de marzo de 2011

riquísimo

la palabra riquísimo resulta una delicia fonética al paladar y al oído.

viernes, 11 de marzo de 2011

sol naciente

pude ver ayer el sol, directo a los ojos
fundirse en el ocaso

otra para no saber más

"¡Qué emocionante! Ese mismo papel que escribió él, con una frase que pensó él, ¡en las manos de ella! Como si fuera otra frase y no la misma y dijera más de lo que él había querido expresar…"


No como al soñar, 1986



Llevo años ya, escribiendo de palabras, acerca de las palabras, su función o papel en éste o cuales planos (no llanuras) como se les quiera ver o entender.

Sigo convencido, que la humanidad llegará a prescindir de ellas.


Fue releyendo como aprendí a convivir en armonía con ellas, lejos ya de la insensatez del martirio.


No se casa uno con ellas.

Habladas se las lleva el viento.

La memoria puede conservarlas (o creer conservarlas)

pero eso es mero invento.

Escritas, tienen un enorme peso y responsabilidad.

Leído, cree que se asimila e igual se almacena, pero se transforma con el tiempo, casi tanto como con la persona entre las personas y el segundo en el universo.

Finalmente siendo palabras, qué es lo que le da más validez a unas que otras?

no son todas palabras?

bueno

basta una mirada alrededor

no somos todos seres humanos?

que va!

pero si ese tiene un ojo que tiembla y la que camina por allá lo hace con una ligera inclinación hacia la derecha.


tú decides

pueden ser una sentencia

ó una cárcel,

lo mismo que un juego romántico en el que los actos se funden dando vida a las construcciones del día a día para que a tus sentidos pueda ser -y me encantaría se leyera rápido y sincero como- un te amo.


construcción7destrucción

cambiar de teclado era desprenderse de la personalidad.

adoptar una nueva piel.

resolver el floreciente advenimiento de huellas sobre la arena húmeda.

quiero volver a la playa.


jueves, 10 de marzo de 2011

go to sleep

tomó el primer avión.
horas después encontraría su cámara y la curiosidad podría más.
tomas de las extensiones de la ciudad sobre el cerro, podría jurar que llegó en avioneta a juzgar por la altura.
al abrir la puerta se dejó venir corriendo.
con un hitter y tololoche en manos, el remedio para el abrazo no pudo ser otro que soltarlos.
ninguno cayó al suelo.
sólo su silueta, pequeña,
sus ojos
un breve silencio
y después comenzó a hablar emocionada
cuántas cosas no habían sucedido!
le compartí un poco de mota y le invité a tomar asiento, pero ya no había sillones.

-no no, mejor toca algo.

el tololoche volvió a mis brazos,
y los dedos reconocieron el color de las cuerdas y las notas.
sonó tan certero como la primera vez que vibraron.

salimos a dar una vuelta, y vaya sorpresa
la selva.
un río bastante ancho nos aguardaba como guía.
larissa había desaparecido ya.
a lo lejos se percibía el rumor de mucha gente, pero no era posible verle.

apareció también mane, y ya entrados en el río emprendimos camino.
el agua cubría en un principio hasta las rodillas,
conforme fuimos avanzando, se sintió la pendiente del cerro.
árboles a las orillas, entre verde y amarillo
de imponente altura -quiero creer: - reconocían el respeto de nuestros pasos y por lo mismo filtraban una luz que los hacía ver como amorosos padres.
fue cuando me percate de que no había cielo.
sólo árboles.

unos metros más adelante llegamos a un desnivel.
una pequeña cascada mediana en escalones.
mane fue el primero en bajarlos.
me senté a la orilla, por encima de la cascada y me dejé llevar por el agua.
mi sorpresa vino cuando al llegar abajo, mis pies no alcanzaban ya el suelo.
mane me tendió una mano, pero resbaló y terminamos ambos por nadar.
la sensación purificante del agua.

finalmente, en una bifurcación
a la izquierda una enorme cascada caía cerca unas tiendas de campaña que yacían ancladas al agua.
a la derecha, bajando entre unas rocas, más gente.
-deben ser los cometortas-
no pintaba bien
se olía la basura y el hedor humano
muchas voces, mucho ruido
así que regresé a mi cuarto
ángel me roló una cola para rellenar el hitter que también me extendía.
limpié el hitter, lo rellené, se fue la luz
le di un buen tanque
y lo rolé.
sonaba black hole sun de soundgarden
una versión
bastante extraña
subí el volumen a la grabadora
y vi entonces la cámara.
la curiosidad pudo m´s
dándole play
ahora me veía yo inmerso en la imagen
sobrevolando las calles a una relativa distancia baja
edificios naranjas
canchas de basquetbol
calles de cantera y piedra rosa
planeando
agradecí la ligereza de mi cuerpo
sabía que sus ojos habían recorrido éste mismo camino
no podía asegurar si de la misma forma o dentro de un avión
pero algo dentro me aseguraba que...
terminó el video
y me vi nuevamente en mi cuarto
tomé mis cosas y antes de salir di un vistazo a la computadora que reposaba en un anaquel del clóset
abrí mi correo y a la izquierda en la lista de contactos
un punto verde junto al nombre de vero
un click
-hey!

-hola.
que loco...

momento,
esto es un sueño(!?)

abrí los ojos y como por reflejo volteé hacia la ventana.
los rayos del sol se concentraban a la mitad del marco, deben ser las 8.

me levanté entre lagañas y pachequez.
abrí la computadora y comencé a escribir los recuerdos de...
momento.



martes, 1 de marzo de 2011

?

¿Debería escribir sobre aquello que no me deja dormir?

¿o sobre las imágenes que el día a día me regala?

-en verdad creía que algo significativo ocurría entre el andamiaje de esas ramas meciéndose a merced de un viento de compás implacable-

¡tal vez sobre la musa esquiva... ... ....

¿sobre un fin del mundo por el que muchos claman?

¿o de la peculiar situación del país que me vio nacer y ahora se desangra?

Un ensayo acerca de la ridiculez imperante en el marco del estado de derecho que pretende definir la legalidad aún cuando el motor de las instituciones que lo imponen hallan su combustible en la ilegalidad.

Un cuento en el que pueda ocultar entre letras la locura a la que parece conducirme el traumatismo craneal de hace algunos días.

Un poema que absorba con delicadeza alquímica la gelatina de melón más deliciosa que jamás haya probado.

¿Una anécdota cuya simpleza sea capaz de arrancar una sonrisa al más impávido de los baobabs?


¿Sobre qué escribir ahora?

domingo, 27 de febrero de 2011

un día largo como un siglo

tal vez me acostumbré a verte demasiado
la idea de repentinamente, no volver a escuchar la puerta sonando fue tan irreal.

en unos meses apenas -y es que ya no sé qué demonios es el tiempo- parecía todo...
claro es el recuerdo de la sonrisa, del periódico que leíamos para buscar trabajo y terminábamos usando para forjar la marihuana.
cuántas imágenes flotando en el mundo.
grabadas como perla en una caja de cerillos.

y es que tampoco hallo ya palabras que puedan traducir lo que siento.
si bien la vida sigue, la maldita costumbre igual al vicio, parece no encontrar otro huésped en dónde anidar su fecunda semilla.

ayer?
mañana?
unos días
unos años
lo mismo da.
tengo y de eso estoy sumo agradecido,
la suerte
de esos instantes haber compartido.

he comprobado también
que los planes a futuro siempre se realizan,
no precisamente en la manera en que uno espera
pero ya ves,
una mejor persona
un mejor trabajo
una mejor vida.

buscamos tantas cosas, a veces nos perdemos de tanto buscar
a veces parece que no hallamos la salida
pero al final...

en ésta o en otra vida, nos hemos de encontrar.

somos todos viejos conocidos,
a veces tan viejos, que nos cuesta una vida reconocernos,
para al final
volver a comenzar.















a la memoria de Omar Ballesteros Barajas y Plutarco 'el tlatoani del barrio'